Soy un tlajomulquense orgulloso de mi tierra. Nací el 20 de septiembre de 1970 y crecí en Cuexcomatitlán, localidad de mi querido Tlajomulco.

De mis padres y abuelos heredé el amor por Tlajomulco, el valor de trabajar por nuestra tierra y darlo todo por lo que amamos. Soy un hombre de palabra que está con su gente en las buenas y en las malas.

Por ello, tengo toda la vida trabajando y defendiendo a Tlajo: de 2003 a 2005 fui presidente del ejido de Cuexcomatitlán, en 2009 me sumé al proyecto que ha transformado a Tlajomulco desde hace 11 años, participé como director de medio ambiente y ecología en el gobierno de Enrique Alfaro y representé al municipio como diputado local de 2012 a 2015 y como diputado federal de 2015 a 2018.

Hasta hace unos días me desempeñé como presidente municipal. Demostré que sé trabajar, que defiendo a nuestra gente y que soy un hombre de palabra. Aquí enfrenté la batalla más importante de mi carrera política: defender el bosque La Primavera de quien se cree su dueño y quiere destruirlo.

Hacerlo ha provocado una serie de mentiras y amenazas en mi contra con las que han intentado destruir mi integridad y mi carrera política; pero si algo hemos dejado claro es que cuando se trata de defender a Tlajomulco y lo que amamos, nada ni nadie nos detiene.

Estoy orgulloso de mi Tlajo porque si algo nos distingue es que aquí hacemos las cosas con amor: la birria de San Miguel, las gorditas de Cuexco, los molcajetes de San Lucas, las piezas de barro bruñido de San Juan, la soga para charrería de San Miguel, la charrería, montar a caballo, los bailes típicos y la música regional.

Soy un hombre de palabra, con hechos te he demostrado que sé gobernar y conozco Tlajomulco. Por eso, te invito a que sigamos juntos para terminar mejor lo que empezamos bien. ¡Sigamos por amor a Tlajo!